La cerveza que protagoniza esta entrada es, seguramente, una vieja conocida de la mayoría de los amantes de la cerveza en España. Es uno de esos clásicos belgas que desde hace tiempo resulta fácil encontrar en supermercados, y también en esos bares que apostaron por la cerveza variada y de calidad mucho antes de que la cerveza artesana comenzase a triunfar en nuestro país. Hablamos de Duvel, de la compañía Duvel Moortgat, responsable de otras marcas bien conocidas como Maredsous, Liefmans, La Chouffe o De Koninck, entre otras. La Brouwerij Moortgat original fue fundada en 1871 por Jan-Léonard Moortgat, y pronto se convirtió en una cervecera de éxito en diferentes partes de Bélgica. Durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918) se estrecharon las relaciones entre este país y el Reino Unido, y los cerveceros de Moortgat desarrollaron un gran interés por las ales británicas, un interés que les llevó a decidir elaborar una cerveza basada en las mismas. Para ello, y tras un periplo por el Reino Unido, Albert Moortgat (hijo de Jan-Léonard) consiguió hacerse con una cepa de levadura (los cerveceros belgas dan más importancia que nadie a la levadura) usada en una cervecera escocesa, la cual emplearon para crear su nueva receta. Se trataba de una cerveza dorada, como las Pilsner que triunfaban en otras partes de Europa, pero con la intensidad característica de las cervezas belgas y con un toque lupulado fruto de la influencia de las ales británicas. En un principio, tras conseguir perfeccionar la receta, la llamaron "Victory Ale" para conmemorar el fin de la Primera Guerra Mundial con la victoria del Triple Entente. Sin embargo, en una sesión de cata celebrada en 1923, un empresario local muy impresionado por la cerveza exclamó que era "een echten duvel" ("un verdadero diablo" en flamenco), una afirmación que caló tan hondo entre los aficionados a esta cerveza y gustó tanto a sus creadores que estos últimos decidieron llamarla Duvel de ahí en adelante. Este diabólico nombre bien lo merece su 8,5% ABV, obtenido tras un cuidado proceso de fermentación y maduración que consta de cuatro fases: 1) fermentación a 20-26 ºC, realizada aun hoy en día con la misma cepa de levadura traída de Escocia en torno a 1920; 2) maduración en tanques a -2 ºC; 3) tras la adición de levadura y azúcar, 2 semanas de fermentación en botella a 24 ºC; y finalmente 4) 6 semanas de maduración en frío. Así se hace esta cerveza, y así nació un estilo, ya que Duvel fue la primera Belgian Golden Strong Ale de la historia, la que sentó las bases para otras grandes cervezas de este tipo que han ido apareciendo posteriormente. Pero este no es el único punto en el que Duvel ha sido una cerveza pionera, en 1960 fue diseñado su característico vaso, y fue nada menos que la primera copa tipo tulipa de la historia. No es de extrañar, por tanto, que a pesar de su relativa juventud se codee con los grandes clásicos del país cervecero por excelencia, y que figure en el libro Great Beer Guide - 500 Classic Brews del eterno Michael Jackson.
Duvel es una cerveza de color dorado claro, nublado por una levísima turbidez. Al servirla aparece la gruesa capa de espuma blanca que la caracteriza, cremosa y persistente, la cual va dejando un auténtico "encaje de Bruselas" que forra el interior de la copa. Al acercar la nariz encontramos un aroma complejo que recuerda a manzana verde al principio, para luego evolucionar con la aparición de notas de fruta madura con toques de levadura y especias. En boca presenta un cuerpo medio y una textura sedosa. El sabor es algo dulce con un final suavemente amargo y algo seco. Resulta bastante alcohólica en el primer trago, pero no es así por mucho tiempo, en tragos sucesivos la sensación es de que el alcohol está muy bien integrado. En el paladar dominan las notas frutales, acompañadas de un toque de bizcocho.
Este clásico belga es una auténtica delicia, por algo ha creado escuela. Es una cerveza intensa que hay que disfrutar con calma, de lo contrario puede ser muy peligrosa (con su frescura y su alcohol bien integrado que no deja de ser un 8,5% ABV, os podéis hacer una idea). En cuanto al maridaje, la Duvel es ideal para acompañar platos de pescado, sobre todo pescados blancos al horno.
Estilo: Belgian Golden Strong Ale
ABV: 8,5%
Amargor: 33 IBU
Lúpulos: Saaz y Styrian Goldings
Malta: Pilsner
Ingredientes adicionales: Glucosa
een echten duvel no nen echten duvel....
ResponderEliminarArreglado, muchas gracias por la corrección!
Eliminar